domingo, 15 de diciembre de 2013

Tribunal de les aigües (tribunal de las aguas)

El Tribunal de las Aguas de la Vega de Valencia es, sin duda, la más antigua institución de justicia de Europa. Su reunión semanal, en el lado derecho de la gótica Puerta de los Apóstoles de la catedral de Valencia, es una cita obligada para todo aquél que desee retornar a tiempos árabes. Basta con esperar a que las campanas del Micalet de la Seu den las doce horas y el alguacil, tras solicitar venia presidencial, llame públicamente: "¡Denunciats de la Séquia de Quart!".
El origen de tal legado es de los árabes quienes concretaron las formas que aún mantiene el Tribunal de las Aguas de Valencia. Las primeras referencias aparecen en el Califato de Córdoba, con los gobiernos de Abderraman II y Al-Hakem II, aunque la certeza histórica se encuentra cuando Jaime I el Conquistador se hizo con la ciudad, en 1238, y confirmó, en el Fuero XXXV, todos los privilegios que tenían los regadíos cuando Valencia era agarena: "segons que antigament es e fo establit e acostumat en temps de serrahins" ("según de antiguo es y fue establecido y acostumbrado en tiempos de los sarracenos")
Según refiere Jaubert de Passa, en 1844, "el Tribunal o cort de los acequieros se compone de los Síndicos mayores de las siete Acequias que riegan la Huerta de Valencia… No se ve ningún soldado para proteger el Tribunal, ningún portero, ningún abogado ni procurador para defender a las partes; el auditorio forma un círculo alrededor de los bancos y un profundo silencio anuncia que la justicia puede hacerse respetar sin el auxilio de la fuerza…".


El funcionamiento del tribunal es muy sencillo. El denunciado es citado por el Guarda de la acequia para el jueves siguiente. Si no acude, se le cita sólo dos veces más, antes de admitir la denuncia y juzgarle y condenarle en rebeldía. Nunca se ha usado la fuerza pública para lograr la comparecencia. A las doce del mediodía del jueves, los síndicos ocupan sus sillones en la puerta de la catedral en presencia del Alguacil del Tribunal, antaño Guarda Mayor o atandador, encargado de dar el agua y levantar las compuertas. Porta un arpón de latón dorado con dos púas, una de ellas encorvada, con el que se separaban y recogían las tablas de las ranuras de los partidores. El Alguacil solicita del Presidente la venia y reclama: "¡Denunciats de la Séquia de Quart!".



Las denuncias versan sobre hurtar agua en tiempos de escasez; rotura de canales o muros; sorregar echando agua en campos vecinos para dañar la cosecha; alterar los turnos de riego; tener las acequias sucias impidiendo que el agua circule; levantar la parada cuando un regante está usando su turno; regar sin solicitud de turno… Pueden ser juzgados los empleados de las acequias, los síndicos e, incluso, personas ajenas a los regantes si han causado algún daño al sistema de riegos. En este caso, si no comparecen, se les condena igualmente y se presenta la preceptiva querella civil, en la que se utiliza como prueba la sentencia del Tribunal de las Aguas.
A la llamada del Alguacil, acuden los denunciados, acompañados por el Guarda de la Acequia. Las citaciones siguen el orden en que las acequias toman el agua del río. La primera es Quart y, la última, Rovella. El Guarda expone el caso o presenta al querellante, para acabar con la frase: "Es quant tenia que dir". A ello, el Presidente contesta: "qué té que dir l’acusat?", permitiendo defenderse al acusado. El juicio es oral e, íntegramente, en lengua valenciana (tras la primera Ley de Aguas, se lleva un registro donde aparecen denunciado, acequia, denuncia y fecha). Todos intervienen en su propio nombre, sin abogados y sin documentos escritos; se puede llamar a testigos e, incluso, pedir la visura o inspección ocular El tribunal puede hacer las preguntas que crea precisas antes de, en presencia de los interesados, deliberar y sentenciar.

3 comentarios:

vipuchol dijo...

Muy buenas colega. Aunque los cortes enla primera (los pies) y la última (el de la izquierda) no me convencen.
Detalles menores, pero es que estoy de un tiquismiquis subido.
Saludos.

JGBiot dijo...

Son cosas del directo y no poder moverte hacia atrás, por las cien personas que tenia.Al ser un objetivo fijo de 24mm. no se podía hacer mas que...vale mas una media foto que no hacerla.
Un saludo.

Tomás Martín Ruiz dijo...

Buen trabajo Juan, siempre se podrán mejorar.
Un abraç amic.